Inevitablemente cuando pensamos en Mallorca a nuestra cabeza vienen imágenes de playas de arena fina y clara, con un agua azul turquesa y rodeadas de pinares. Y es que en las Baleares encontramos un auténtico paraíso. Pero en Mallorca hay muchos más lugares que conocer. En este post te hablo de los 8 pueblos más bonitos y con más encanto de Mallorca.
LOS 8 PUEBLOS MÁS BONITOS Y CON MÁS ENCANTO DE MALLORCA
1. Banyalbufar
Banyalbufar es una pequeña localidad pesquera, se encuentra situada en la Sierra de Tramuntana a unos 25 km de Palma de Mallorca, encarada al mar. Es uno de los lugares secretos de Mallorca mejor guardados.
Su origen se remonta al siglo X, cuando los árabes llegaron a construir en esta población casi dos mil casas y desarrollaron un sistema de riego a base de acueductos que en la actualidad todavía se mantiene operativo. La zona adquirió importancia gracias el cultivo de malvasía, una variedad de uva especialmente apreciada por Jaume I. De hecho, parece ser que ese fue uno de los alicientes que animaron al rey a reconquistar la isla.
En Banyalbufar no puedes perderte visitar sus bodegas artesanales; Son Vives y C’an Pico. Las dos bodegas ofrecen visitas guiadas.
En la localidad también podéis ir hasta la torre de Ses Ànimes, una antigua torre de vigilancia, desde dónde podréis observar unas vistas espectaculares del litoral y el mar.
Cerca se encuentra un pequeño puerto pesquero, Es Port des Canonge. Los amantes del senderismo pueden disfrutar de una ruta que une Banyalbufar y dicho puerto y discurre entre pinares y formaciones rocosas.
2. Valldemossa, uno de los pueblos más bonitos de Mallorca
Valldemossa es uno de los pueblos más bonitos no solo de Mallorca, sino de las Baleares. Con sus calles empedradas repletas de coloridas macetas y azulejos en honor a Santa Catalina hacen de esta población un lugar con mucho encanto. Se encuentra muy cerca de Palma. En el siglo X este pueblo se empezó a llamar Wadi Muza o Valle de Mussa. En la conquista cristiana de 1229, esta población se mantuvo con el mismo nombre, hasta algunos años más tarde cuando se la denominó Valldemossa. En esta localidad fue dónde se instaló la primera imprenta de toda la isla, en el año 1485.
El lugar más emblemático de la población es la Cartuja de Valldemossa. Fue Jaume II quien la mandó construir en el año 1.309, y su hijo Sancho I y su nieto Jaume III los que en ella moraron. Martín el Humano, rey de Aragón y protector de los cartujos, cedió a estos monjes el palacio, adaptándolo a las necesidades de un convento. Con la desamortización de Mendizábal el monasterio pasó a manos privadas convirtiéndose primero en residencia y luego en museo. No os perdáis la celda nº4 donde se expone el auténtico piano que Chopin recibió desde París.
En Valldemossa también se encuentra el Palacio del Rey Sancho, la Parroquia de Sant Bartomeu, la ermita de la Santísima Trinidad, el Monasterio de Miramar y la fundación Coll Bardolet.
Desde Valldemossa podéis hacer algunas excursiones. La más popular es una ruta entre encinas y olivos para llegar al Molinet de la Beata. También hay una ruta para llegar a la Montaña del Teix, lugar elegido por el archiduque Luis Salvador para construir un mirador con unas preciosas vistas al mar. Otros dos miradores de la zona son el de Puig de Sa Moneda y el de Miranda des Lladoners, desde dónde tendrás unas vistas espectaculares de la zona.
En Valldemossa se encuentra el pequeño puerto de Sa Marina, puerto que ya en la ocupación romana ya era habitado, posteriormente deshabitado en la época de la piratería y en la actualidad un lugar con encanto, de aguas cristalinas y núcleo vacacional.
3. Deià
Gran parte de la belleza de Deià radica en su privilegiada ubicación. Su nombre viene de ‘daia’ que significa aldea. En época de dominación musulmana ya funcionaba un sofisticado sistema de riego y desagüe que aún hoy se utiliza.
En el siglo XIII se construyeron 3 monasterios católicos en sus alrededores.
Su paisaje, repleto de olivos, encinas y cítricos ha sido fuente de inspiración para escritores, músicos y artistas. Este lugar ha conquistado, entre otros, a Manuel de Falla, Ulrich Leman, Andrew Lloyd Webber, Santiago Rusiñol, Mike Oldfield, William Walder y al más ilustre de sus vecinos, Robert Graves, escritor que se inspiró en Deià para escribir el que fue su libro más conocido; Yo, Claudio.
Deià se encuentra en plena Sierra y tiene una infinidad de rutas de senderismo con paisajes que te dejarán con la boca abierta.
En la población se encuentra el museo de arqueología de Deià, también se puede disfrutar de música clásica en directo, y si te apetece un bañito puedes hacerlo en Cala Deià, a tan solo 5km del centro del pueblo. Una bonita cala, pequeñísima, muy íntima, rodeada de formaciones rocosas y vegetación.
4. Soller, uno de los pueblos más bonitos que ver en Mallorca
Soller a diferencia de los anteriores pueblos, es mucho más grande. Cuenta con 15.000 habitantes.
La forma más romántica y chula de llegar a Soller es a bordo del famoso ferrocarril de vía estrecha que une Palma de Mallorca con esta localidad desde el año 1912.
El origen de Sóller se remonta a la época talayótica, habiéndose encontrado vestigios que podrían fecharse entre los años 5.200 y 2.700 a. C.
En la localidad puedes visitar el Museo Municipal para conocer la historia de Soller. Otros lugares emblemáticos que no te puedes perder son el museo modernista de Can Prunera, la iglesia de Sant Bartomeu y el pintoresco puerto.
Soller está ubicado en el Valle de los Naranjos. Así que para complementar tu visita no puedes irte de Soller sin probar un zumo de naranja, un helado o su versión alcohólica. Aunque hay muchísimos más productos artesanales, como mermeladas, vinagre balsámico de naranja, galletas…
En la misma población se encuentra la playa. Es un lugar escogido por muchos para alojarse. Si te apetece puedes ver ofertas y disponibilidad de alojamientos en Soller desde aquí.
5. Capdepera
La población de Capdepera se encuentra en el extremo oriental de la Isla. La zona cuenta con números calas; Cala Rajada, Cala Cañamel, Cala Mesquida y Fuente de la Cala.
Capdepera es conocido por tener 41 yacimientos arqueológicos, entre el siglo X y II a.C. entre los periodos pretalayóticos y talayóticos. Si te interesa conocerlos, no puedes perderte las cuevas artificiales de Son Jaumell, los poblados de Sos Sastres, Son Barbassa, Puig de S’hort, es Claper des Gegant o Son Favar.
En esta localidad también se encuentra el Castillo de Capdepera. Un impresionante recinto fortificado, construido en el siglo XIV y declarado como patrimonio histórico.
Otros de los lugares que no te puedes perder del centro histórico del pueblo son las Casas señoriales Ca’n Piricus y Ca’n Creu d’Inca y la parroquia de San Bartomeu.
La población es bastante grande y al tener varias opciones de playa es una zona muy popular para alojarse. Puedes ver disponibilidad y precios de alojamiento en Capdepera desde aquí.
6. Portocolom
Este pueblo pesquero es precioso y muy auténtica de Mallorca. Se encuentra a unos 10km de Felanitx.
La población destaca por su pequeño puerto, sus antiguas cabañas a pie de puerto, renovadas y pintadas de colores y por su iglesia.
En pueblo en sí no tiene mucho, su encanto reside en la zona y en la tranquilidad y paz del lugar.
Aquí se encuentra uno de los faros más bonitos de la isla ¡No te lo pierdas!
7. Andratx
Esta población es bastante turística y aquí se encuentran una gran cantidad de casas de segunda residencia de extranjeros. No por ello, la población pierde encanto.
En ella encontramos calles y callejuelas ideales para perderse y disfrutar de cada detalle. Así como de su puerto. Los miércoles en Andratx se monta el mercado. Un mercado tradicional con más de 200 puestos.
En Andratx tienes que visitar La Trapa, reserva natural, dónde destaca su mirador. Desde dónde podrás ver la isla Dragonera.
8. Alcudia
Aunque Alcudia ya la podríamos considerar una pequeña ciudad en Mallorca, no podía faltar en la lista de las poblaciones más bonitas de Mallorca.
Fue fundada en el siglo II a.C, y conjuntamente con Palma de Mallorca, es una de las ciudades más antiguas de Mallorca. ¡No te faltaran cosas por hacer en Alcudia!
En el centro histórico de la ciudad hay numerosas casas señoriales, magnificas murallas y las imponentes puertas de entrada a la ciudad.
Pasear por sus calles, entretenerse a observar los detalles, comer en alguno de sus restaurantes y comprar en algunas de sus tiendecitas, es el plan perfecto para una tarde de tus vacaciones en Mallorca.
En la ciudad también se encuentra el museo de Bassa Blanca, las ruinas romanas de la antigua Pollentia y sus 20 playas.
La zona de Alcudia tiene algo más de 30 km de costa. Y un total de 20 playas, que son un paraíso. Algunas de las playas más bonitas son; la playa de Alcudia, la playa de Muro, la playa de Sant Joan o Coll Baix. Pero en realidad es difícil escoger porque todas son preciosas.
Los martes y los domingos se celebra el mercado tradicional, ocupando gran parte del centro histórico.
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