Florencia es una de las ciudades más bonitas de Italia. Es ideal para escapadas de fin de semana o para incluirla en tu recorrido por Italia, o por la Toscana.
Personalmente creo que toda Italia es preciosa, y a medida que voy conociendo más ciudades, más me gusta. Así que no podria asegurarte que Florencia es la ciudad más bonita, no obstante, si te aseguro que Florencia enamora, tiene una esencia especial y gusta a todo aquel que se atreve a conocerla En este post te cuento sobre que ver y hacer en Florencia, dónde alojarse y algunos tips de viaje.
QUÉ VER EN FLORENCIA, LA CIUDAD MÁS BONITA DE ITALIA
En Florencia hay un free tour para que conozcáis los lugares más emblemáticos y bonitos de la ciudad, de la mano de un guía de habla española.
Disfrutar de las vistas
Puedes disfrutar de unas vistas espectaculares de la ciudad de Florencia desde el Campanile di Giotto ¡después de haber subido sus 414 escalones!
Catedral de Santa Maria in Fiore
Esta Catedral es una de las obras maestras del arte gótico y del primer Renacimiento italiano. Sobresale de todos los demás edificios de la ciudad, con lo que es fácil localizarla.
Se creo como símbolo de riqueza y grandeza.
Destaca sobre todo la cúpula, una enorme cúpula creación de Filippo Brunelleschi, tiene un altura de 114.5m y un diámetro 45.5m.
La basílica se encuentra dentro de la declaración del Centro histórico de Florencia como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO desde 1982.
Puente Viejo
El puente viejo es un puente medieval por el que cruza el río Arno. Es uno de los puentes más famosos del mundo y es una parada obligatoria si vas a viajar a Florencia.
El puente se sostiene sobre tres arcos; el principal tiene una luz de 30 metros y los otros dos de 27 metros. Tiene una longitud de 67 metros.
Inicialmente fue construido de madera por los romanos. A lo largo de los años ha sido destruido muchas veces, por el caudal del río. Finalmente en fue reconstruido enteramente de piedra entre 1335 y 1345.
Desde siempre ha habido varias tiendas y gran actividad comercial. Dice la leyenda, porque en el puente había exención de impuestos. Los comerciantes eran autorizados antiguamente a mostrar sus mercancías sobre mesas, por el Bargello (una especie de magistrado comunal). Se cree además que el término Bancarrota se originó en este puente, debido a que cuando un vendedor no podía pagar sus deudas, su mesa o puesto para la venta, era rota por los soldados: banco+rotto, bancarrota. Al no disponer ya de una mesa el comerciante no podía vender sus mercancías.